a 31 años de su muerte ...

Ian Kevin Curtis fue el vocalista y compositor de la banda británica Joy Division que emergió de un barrio de clase media de Manchester y la cual marcó terreno en la cresta de la era conocida como el after punk. Por sus letras depresivas y suicidas, por su voz grave y forma extraña de bailar, Ian Curtis es considerado como uno de las más grandes influencias de esta época en el rock.

Durante un concierto de Sex Pistols, Curtis conoció a Bernard Summer y Peter Hook con quienes formó la banda , la cual llamaron Warsaw - después cambiaron a Joy Division y en la que el lideraba como vocalista y letrista. Posteriormente, ante varias audiciones para batería, se unió Stephen Morris.

La voz de Curtis impregnaba cierta oscuridad a sus canciones, en las que era muy notable el tono depresivo y seco en las letras como Disorder, The Day of the Lords, Love Will Tear Us Apart y muchas más.

Desafortunadamente padecía epilepsia y sufrió varios ataques inclusive en el escenario. Su forma de bailar era una evocación a los ataques epilépticos por lo que en muchas ocasiones la gente en sus conciertos no sabían si en realidad estaba bailando o sufriendo un ataque.

Los efectos negativos de su enfermedad más algunos problemas personales, entre ellos un inesperado divorcio, orillaron a Ian Curtis a quitarse la vida el 18 de mayo de 1980, a pocos días a que iniciaran su primera gira en los Estados Unidos. El se encontraba solo en su casa de Manchester, había visto la película Stroszek, de Werner Herzog ( su favorita y en la que se muestra la complicada vida de un artista que termina suicidándose). Finalmente se colgó en su cocina mientras escuchaba el disco The Idiot de Iggy Pop. Fue incinerado y sus cenizas fueron enterradas en el pueblo donde creció.

Su muerte marcó el final de Joy Division; ese mismo año se lanzó en forma póstuma su segundo álbum: Closer. Un año más tarde, Hook, Summer y Morris más el tecladista Gillian Gilbert se rebautizaron como New Order.

El legado que dejó Ian Curtis junto con Joy Division inspiraron tanto en imagen como en actitud en los escenarios a grandes bandas como U2, The Cure, Interpol, White Lies, etc. The Killers hicieron su propia versión de uno de los himnos de Curtis llamado Shadowplay.